Varios metales son altamente tóxicos y se sabe que se bioacumulan en los alimentos. Se sabe que los mariscos tienen un riesgo muy alto de contaminación por metales pesados debido a la bioacumulación; sin embargo, todos los productos primarios pueden contaminarse con fuentes ambientales. Los metales pesados en los alimentos están regulados en todo el mundo con límites específicos en la mayoría de las materias primas.
ALS puede ofrecer una detección completa de metales de interés. Además de los “cuatro grandes” metales tóxicos (plomo, cadmio, arsénico y mercurio), ALS puede detectar una amplia gama de metales mediante ICP-MS; además se pueden utilizar técnicas compuestas para buscar formas específicas de metales como arsénico orgánico o mercurio metilo.
Los metales de interés típicos son: